En repostería, las preparaciones con frutos secos suelen ser sinónimo de éxito, galletas o bizcochos con almendras, pistachos, castañas o nueces, son un disfrute para el paladar. Hoy le ha tocado el turno a las avellanas con un estupendo bizcocho de avellanas.
Al tratarse de una masa bastante compacta, el proceso de horneado es especialmente largo. El resultado es un bizcocho jugoso, tierno y con mucho sabor, perfecto para los desayunos o las meriendas.
RACIONES: 10
DIFICULTAD: baja
TIEMPO. 1,5 horas
BIZCOCHO DE AVELLANAS:
- 350 gr. HARINA
- 225 gr. MANTEQUILLA
- 1 cdita. LEVADURA
- 1 cdita. BICARBONATO
- 4 HUEVOS M
- 250 ml. LECHE
- 250 gr. AZÚCAR
- 120 gr. AVELLANAS
- 1 cdita. ESENCIA DE VAINILLA
- SAL
- AZÚCAR GLASS PARA DECORAR
1.- Comenzamos batiendo la mantequilla con el azúcar hasta que forme una crema esponjosa. es fundamental que la mantequilla esté a temperatura ambiente, blandita para poder trabajarla.
2.- Añadimos la esencia de vainilla y los huevos, uno a uno, incorporando cada uno antes de añadir el siguiente.
3.- En un bol mezclamos la harina, la sal, la levadura y el bicarbonato y reservamos.
4.- Tostamos las avellanas en una sartén durante unos minutos. Una vez tostadas nos resultará más fácil sacarles la pielecilla negra que las cubre. Para ello las ponemos en un paño de cocina y las restregamos con él. No os preocupéis si no conseguís eliminarles a todas la pielecilla negra, el resultado será igualmente bueno.
5.- Molemos las avellanas y las añadimos al bol con la harina. Mezclamos bien.
6.- Añadimos, de forma alternativa, la leche y la harina a la crema de azúcar y mantequilla, en varias veces. Mezclamos bien sin batir en exceso la mezcla.
7.- Untamos un molde con mantequilla y lo forramos con papel de horno. Vertemos la mezcla en el molde y, con el horno previamente caliente a 180ºC, horneamos el bizcocho durante 60 minutos, hasta que al pincharlo la punta del cuchillo salga limpia. Los últimos 15 minuos de cocción del bizcocho podemos taparlo con papel de aluminio para evitar que se nos dore demasiado la superficie.
8.- Retiramos el molde del horno y lo dejamos atemperar unos 15 minutos antes de desmoldar el bizccoho. Dejamos que se enfríe totalmente sobre una rejilla antes de consumirlo. Una vez frío lo espolvoreamos con azúcar glass y listo para disfrutar.