Crema de espinacas

Sigo con recetas sencillas que aprovechan el producto de mercado de esta época del año. Otoño es la estación ideal para la huerta de vegetales verdes: coliflor, repollo, acelgas, espinacas, brécol, coles de bruselas, así como zanahorias y remolacha. Con esta variedad uno tiene la despensa abierta para un sinfín de platos. 

En esta ocasión he preparado una sencilla y buenísima crema de espinacas, aprovechando que tengo unas estupendas que conseguí a través de EgaliYa os hablé en alguna ocasión de esta gente, una cooperativa de productores ecológicos gallegos en la que podemos conseguir todo tipo de productos de la huerta, así como carnes, miel… con la garantía de una producción y cosecha ecológica. Y claro, ya que contaba con un par de manojos de espinacas de calidad, quise hacer una receta que no enmascarara su sabor en absoluto, y nos permitiera disfrutar de unas espinacas de verdad, o sea, una crema.

Para hacer una breve reseña de sus propiedades os comento que, las espinacas, son ricas en vitaminas A, B, C, E y K, yodo y algún que otro antioxidante. Contiene más betacarotenos que las zanahorias y son ricas en potasio, calcio y fósforo. 

Debido a su riqueza en clorofila es un potente anticancerígeno, su alto contenido en hierro las hace ideales contra la anemia, son recomendables para las mujeres embarazadas por su alto contenido en zinc y ácido fólico.

RACIONES: 4

DIFICULTAD: Baja

TIEMPO: 30 minutos

CREMA DE ESPINACAS:

  • 400 gr. ESPINACAS
  • 2 CEBOLLETAS
  • 2 CUCHARADAS DE HARINA
  • 1250 ml. LECHE
  • 1 PIZCA NUEZ MOSCADA
  • 1 PUÑADO DE PIÑONES
  • 100 gr. JAMÓN SERRANO
  • 50 gr. MANTEQUILLA
  • SAL
  • PIMIENTA

Crema de espinacas

1.- Ponemos a cocer las espinacas previamente lavadas y troceadas. Contaremos 2-3 minutos desde el momento en que el agua comience a hervir y retiramos. Las escurrimos y reservamos. No le añadimos sal a la cocción.

2.-En una cazuela tostamos los piñones con una nuez de mantequilla. Tenemos que mantener el fuego medio y estar pendientes para que no se nos quemen. Reservamos.

3.- En la misma cazuela sofreímos brevemente el jamón previamente cortado en taquitos y reservamos.

4.- Añadimos el resto de la mantequilla a la cazuela y pochamos las cebolletas cortadas en juliana. Cuando estén blanditas añadimos la harina y la cocinamos 1 o 2 minutos. Agregamos la leche templada y sin para de remover dejamos que cueza unos minutos a fuego bajo. Salpimentamos al gusto y añadimos una pizca de nuez moscada. Tenemos que tener en cuenta al añadirle la sal que ya cuenta con alguna de haber sofreído el jamón, así que es mejor que nos quedemos cortos y probemos al final del proceso.

5.- En este momento añadimos las espinacas y la mitad de los piñones, removemos y retiramos del fuego.

6.- Trituramos la mezcla con una batidora y servimos en cuencos individuales añadiéndole a cada uno un puñadito de piñones y otro montoncito de taquitos de jamón.

Espero que os haya gustado la receta tanto como a nosotros en casa, ya me contaréis.