Paté de hígado de pollo

Tengo que reconocer que son pocos los patés que llegan a gustarme. Salvo que se trate de alguno muy especial, por su elaboración y por lo temblando que me deja el bolsillo, no me resultan excesivamente apetitosos. Este era mi pensamiento hasta hace bien poco. Después de haber visto infinidad de recetas y de vencer mi reticencia inicial, decidí probar y tengo que decir que mi opinión ya es otra. Me sigue sin gustar cualquier paté pero ahora puedo decir que sí, el paté, el típico de hígado, me encanta.

La receta de hoy, paté de hígado de pollo y boletus, es una adaptación de la que preparó Pam de Uno de Dos y está de vicio. Me atrevería a decir que, si sois de los que disfrutáis con un buen paté, este no os decepcionará. La receta es muy fácil y como podemos congelar las tarrinas que queramos, podemos tener listo para cualquier momento un aperitivo de categoría. Solo hemos de que retirar el paté del congelador con antelación y listo para degustar.

RACIONES: 2 tarrinas de 250 ml.

DIFICULTAD: Baja

TIEMPO: 30 minutos + 40 minutos de horno

 

PATÉ DE HÍGADO DE POLLO Y BOLETUS:

  • 200 gr. HIGADOS DE POLLO
  • 1 CEBOLLETA
  • 20 gr. BOLETUS DESHIDRATADOS
  • 2 DIENTES DE AJO
  • 2 RAMITAS DE TOMILLO FRESCO
  • 100 gr. DE MANTEQUILLA
  • PIMIENTA NEGRA EN GRANO
  • 100 ml. DE BRANDY + 25 ml. PARA LA GELATINA
  • 1 HUEVO
  • 50 ml. NATA
  • 150 ml. LECHE
  • 3 HOJAS DE GELATINA

1.- Hidratamos los boletus dejándolos durante 30 minutos en un cazo con agua. Colamos y reservamos los boletus y el agua.

4.- Limpiamos los higaditos de pollo de posibles restos de venas que puedan tener y los dejamos macerar en leche durante 30 minutos.

3.- Cortamos la cebolleta finita y los dientes de ajo. En una sartén calentamos unos 30 gr. de mantequilla y rehogamos la cebolleta y el ajo con las ramitas de tomillo y los granos de pimienta. Cuando vemos que la cebolleta está casi transparente añadimos los boletus que tendremos ya rehidratados y dejamos que se cocinen 4-5 minutos. Retiramos del fuego y reservamos.

Si no tenemos tomillo fresco podemos utilizarlo seco pero reduciendo la cantidad ya que el sabor que aporta es mucho más intenso.

4.- Escurrimos y secamos con papel de cocina los higaditos. Añadimos a la sartén 30 gr. más de mantequilla e incorporamos los higaditos. Es importante no freírlos demasiado para que no queden secos, con 4 minutos será suficiente.

5.- Cuando vemos que los higaditos están listos añadimos de nuevo la cebolleta reservada, agregamos el brandy y la sal y dejamos reducir 2 o 3 minutos. Retiramos del fuego.

6.- Con una batidora o un robot de cocina trituramos nuestro guiso hasta que quede muy fino, sin ningún tipo de grumos. Mezclamos el huevo, la nata y el resto de la mantequilla y vertemos en las tarrinas que queramos que sean aptas para horno.

7.- Horneamos a 200º durante 30 minutos. Retiramos del horno y dejamos enfriar.

8.- El agua de los boletos la vamos a emplear para hacer una gelatina de protección y decoración para la superficie de nuestro paté. Pasa eso ponemos a calentar 100 ml. del agua de haber rehidratado los boletus, que teníamos reservada, con 50 ml. de brandy. Cuando hierva retiramos del fuego e incorporamos las hojas de gelatina ya hidratadas. Removemos, de nuevo en el fuego, hasta que se disuelvan, volvemos a retirar del fuego e incorporamos 100 ml. de agua fría.

9.- Cuando la mezcla se haya templado ligeramente la vertemos sobre el paté ya preparado en cada tarrina y guardamos en el frigo hasta que se haya cuajado.